Pues después de ser ovacionado por mis interpretaciones durante el cumple de Sandy, entregué al valet el boleto para que me trajera al rompecabezas. Pasaron 20 minutos y regresó el ‘chofi’ con la excusa más estúpida del mundo: ‘‘Me equivoqué de estacionamiento, está en el otro’’.
Mientras tanto Luisito me hacía compañía y aprovechaba para ver a la chaparrita-de-negro-que-hacía-que-Selena-quedara-en-el-olvido-gracias-a-su-melodiosa-interpretación-del-Tex-Mex.
Pasaron otros 20 minutos y de vuelta el imbécil ese regresó diciendo que el coche estaba ‘‘hasta atrás en el estacionamiento y que era imposible sacarlo’’. Esperamos otros 20 minutos (todo ese tiempo acompañado de mentadas de madre) hasta que no pude aguantarme más y, a punto de madrear al del valet, me explicó la espantosa verdad.
Como el estacionamiento del congal estaba lleno, se les hizo fácil estacionar al rompecabezas en el estacionamiento del sushi que está a unos metros.
El problema es que el sushi cierra a las dos de la mañana y pues el cajón con todas las llaves se había quedado dentro del establecimiento.
Me llevaron a ver al rompecabezas para que me cerciorara de que estaba cerrado y que pasaría lo que quedaba de noche, ahí.
Todo lo divertido que estuve en el festejo, en ese momento estaba de encabronado.
Pusieron a Luis en un taxi, pagaron y lo mandaron a su casa. Segundos después hicieron lo mismo conmigo.
Después de dormitar un par de horas, me levanté temprano y tomé un taxi al estacionamiento del sushi. Ahí, encontré a los tres estúpidos del valet dormidos afuera de mi coche. Dos estaban sentados en el suelo y recargados en cada una de las puertas del bólido, y el tercero, también en el suelo, recargaba su cabeza en la defensa delantera.
Se durmieron ahí ‘‘para cuidar que no le pasara nada al auto’’; me dio mucha risa y ya no quise decirles nada más. Me pagaron el taxi y me dieron mis llaves.
Estos días han hecho que mi reloj biológico no’mas no se estabilice, pero esperemos que no haya más incidentes y la semana próxima sea 'normal'.
El McCoy, quien prefiere buscar lugar para estacionarse en la calle.
Mientras tanto Luisito me hacía compañía y aprovechaba para ver a la chaparrita-de-negro-que-hacía-que-Selena-quedara-en-el-olvido-gracias-a-su-melodiosa-interpretación-del-Tex-Mex.
Pasaron otros 20 minutos y de vuelta el imbécil ese regresó diciendo que el coche estaba ‘‘hasta atrás en el estacionamiento y que era imposible sacarlo’’. Esperamos otros 20 minutos (todo ese tiempo acompañado de mentadas de madre) hasta que no pude aguantarme más y, a punto de madrear al del valet, me explicó la espantosa verdad.
Como el estacionamiento del congal estaba lleno, se les hizo fácil estacionar al rompecabezas en el estacionamiento del sushi que está a unos metros.
El problema es que el sushi cierra a las dos de la mañana y pues el cajón con todas las llaves se había quedado dentro del establecimiento.
Me llevaron a ver al rompecabezas para que me cerciorara de que estaba cerrado y que pasaría lo que quedaba de noche, ahí.
Todo lo divertido que estuve en el festejo, en ese momento estaba de encabronado.
Pusieron a Luis en un taxi, pagaron y lo mandaron a su casa. Segundos después hicieron lo mismo conmigo.
Después de dormitar un par de horas, me levanté temprano y tomé un taxi al estacionamiento del sushi. Ahí, encontré a los tres estúpidos del valet dormidos afuera de mi coche. Dos estaban sentados en el suelo y recargados en cada una de las puertas del bólido, y el tercero, también en el suelo, recargaba su cabeza en la defensa delantera.
Se durmieron ahí ‘‘para cuidar que no le pasara nada al auto’’; me dio mucha risa y ya no quise decirles nada más. Me pagaron el taxi y me dieron mis llaves.
Estos días han hecho que mi reloj biológico no’mas no se estabilice, pero esperemos que no haya más incidentes y la semana próxima sea 'normal'.
El McCoy, quien prefiere buscar lugar para estacionarse en la calle.
3 comentarios:
por qué el rompecabezas???
JAJA se llevaron al rompecabezas a los separos!!
Una muestra más d la total incompetencia d la gente, y encima quieren ganar tiempo diciendo puras babosadas. DEMANDA AL VALET.
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